martes, 2 de octubre de 2012

Rasgos psicopáticos más frecuentes


La lógica del psicópata  es una lógica de tipo militar: de objetivos, de tácticas, de estrategias, de apoderarse de terreno, de ganar territorios, de persistir en el objetivo y utilizar todas las herramientas necesarias para lograr ese objetivo.


A. Satisfacción de necesidades distintas
Los psicópatas tienen necesidades distintas que deben satisfacerse de manera especial, y utilizando recursos especiales, es por ello que no responden a un patrón conductual común.
Algunas tácticas que usan los psicópatas son las siguientes.
La táctica del tero:  el tero tiene la astucia de hacer escándalo llamando la atención de su depredador, pero lo hace lejos del nido, donde están  siendo empollados sus huevos. De la misma manera el psicópata utiliza esta  llamada "cortina de humo" concentrando la atención en situaciones  o temas irrelevantes, mientras solapadamente y en silencio están haciendo su trabajo por otro lado, cuando esto es  advertido  ya  es tarde, "el trabajito" ya está hecho.
Otra táctica que utiliza es intoxicar a la complementaria con abstracciones, la taladra con cuestionamientos, con  descalificaciones, problemas que no son tales, pero esto hace que ella esté todo el tiempo pensando en el, pendiente de el, hablando todo el tiempo de el, de lo que dijo, de lo que hizo… y si escuchamos bien a la complementaria lo que habla de el son banalidades,  ella está preparada  para esto mientras, mientras el hace lo suyo por su lado y lejos de ella, "como el tero"

  Uso particular de la libertad
El rango de libertad del 'normal' es acotado, por presión social o por inhibición propia. El psicópata tiene un rango mucho más extenso, a tal punto que muchas veces da la impresión de que su lema es 'todo es posible'. Un rango de libertad acotado no  le permitiría satisfacer sus necesidades especiales. Es por esto
que todo obstáculo que se interponga a sus propósitos será vivenciado como una traba 'injusta', que
generará una intensa frustración. Éste es el punto débil del psicópata: puede perder el control de sus acciones y, en consecuencia, cometer errores.
 Creación de códigos propios
Los valores se construyen sobre códigos, se valora de acuerdo a ellos.  El psicópata comparte la mayoría de los códigos con el 'normal', por eso puede moverse adaptadamente en una comunidad y no es fácil  detectarlo mientras no accione psicopáticamente. Pero, a su vez, genera códigos propios que le permiten justificar sus acciones tendientes a satisfacer sus necesidades especiales.
El psicópata conoce la normativa general y se comporta de acuerdo a ella mientras no lo obstruya en sus planes. Si esto ocurre, busca la manera de sortear las normas 'inconvenientes', según su criterio. Obsérvese que utilizo el término 'sortear', y no 'transgredir'.
Como está obrando de acuerdo a sus códigos, por lo tanto, de manera justificada, no siente culpa.Se sienten culpables ccuando transgreden sus propios códigos, ahí se convierte en acusador, juez y verdugo de si mismo,y el castigo que se impone suele ser muy por encima de lo que le administrarían los demás. Coloca la responsabilidad de los resultados desfavorables en los otros y en el entorno, para evitar las consecuencias y el asumir su participación en ellos.
   Repetición de patrones conductuales
La necesidad recurrente lleva a la repetición de las mismas acciones que posibilitan satisfacerla. No se repite por que sí. 
 En el acto psicopático hay un estilo, una forma, un  'cómo hacer'. No es algo improvisado, impulsivo o azaroso. La mayoría de estas acciones son pensadas, planeadas y permanecen en latencia hasta que se dan las condiciones del 'cómo hacer' para consumarlas. La vieja idea del acto psicopático impulsivo es un mito.
 Es el estilo, la manera de hacer psicopática, que determina el "perfil psicopático" y que, bien estudiado, permite prever las acciones futuras del psicópata.
 Necesidad de estímulos intensos
 En función de las necesidades especiales el psicópata puede verse involucrado en acciones de alto riesgo. Otra causa puede ser la megalomanía y la omnipotencia, el creer que nada dañoso puede sucederle.
 Hay psicópatas de alto voltaje interior que necesitan estímulos intensos para compensar esas vivencias; de no lograrlos, se vuelven agresivos con su entorno.
 Muchos psicópatas viven el 'hoy', con desprecio del pasado e indiferencia hacia el futuro. Pero hay quienes pueden fijarse metas a largo plazo y van, etapa por etapa, neutralizando todo escollo que se les interponga, a veces astutamente, otras en forma violenta.
 Un psicópata frustrado, resentido, aburrido, puede tomar el camino de las drogas para intentar un re equilibrio interno. Otros se estimulan con drogas para impulsarse a la acción.
  En algunos psicópatas existen rasgos perversos o francas parafilias, y pueden llegar al incesto, pero en otros estos rasgos no están presentes; otros le otorgan al sexo un rol muy secundario.
  B. Cosificación de otras personas
Consideran al otro un objeto. Esto permite explicar varias cosas, como que son egocéntricos,
manipuladores, utilizan a los demás para conseguir sus propios objetivos. Todo psicópata trabaja, siempre, para sí mismo. Cuando da es porque está manipulando o espera recuperar esa 'inversión' en el futuro. La filantropía, auténtica, no figura en su ser.
 Suelen hipervalorar su potencialidad para conseguir cosas. Los hay francamente megalómanos donde el 'todo es posible' se les aparece sin impedimentos. Pero también  los que sobrevaloran sus aspectos pesimistas y son 'la peor basura'.

 Captación de la vulnerabilidad del otro
Tienen habilidad especial para captar la debilidad del otro, a través de estudiar a las personas durante años. No se trata de la empatía, de colocarse en lugar del otro de igual a igual, sino que es una mirada en el interior de 'la cosa' para saber sobre sus debilidades y obrar a partir de ellas para manipular.
 Manipula,  maneja a la otra persona para que accione de acuerdo a su voluntad. Aquí hay que hacer una distinción entre lo que lógicamente quiere hacer y lo que irracionalmente desea hacer. Como se dijo, una de las capacidades del atípico es la captación de las necesidades del otro.
 Seducción: Es una relación bidireccional entre el psicópata y el otro, donde la propuesta del
psicópata encuentra eco en las apetencias del otro; donde el psicópata propone el contrato y el otro
lo firma.
 Mentiras: La mentira es una herramienta más en el arsenal psicopático para conseguir sus fines y es cualitativamente distinta a la mentira de un 'normal'.
 Fascinación: Alteración de la conciencia ligeramente inferior a la sofrológica, producida por el psicópata a determinadas personas.
 Coerción: Relación unidireccional entre el psicópata y el otro, en la que intervienen presiones instrumentales, físicas o psicológicas que impiden la posibilidad de opción en aquel sobre
el que se la ejerce.

  Parasitismo
Utilización del otro como medio de subsistencia. Aquí el psicópata realiza la manipulación necesaria para conseguir sus fines, pero sin presionar demasiado, como actúa un parásito en su relación con el huésped.

 Relaciones utilitarias
El psicópata establece un tipo de relación en la que capta al otro para conseguir un objetivo. Una vez logrado, se desprende de él sin el menor miramiento o consideración. Como una herramienta que no se utiliza más.

 Insensibilidad
Escasa o nula repercusión emocional ante el daño causado al otro en los hechos psicopáticos. Permanece indiferente ante el dolor ajeno, lo cual no implica que, fuera de las acciones psicopáticas, no se muestre sensible a otras personas, mascotas u objetos. Puede ser impiadoso, hacer padecer, dañar severamente a otros, sin repercusión emocional displacentera, y hasta considerar esto como parte del trabajo. Permanece impasible u obra fríamente ante situaciones de tensión en las que un 'normal' se paralizaría, descontrolaría o accionaría inadecuadamente.

  C. Acto psicopático grave
Estos actos son lo suficientemente contundentes como para que cualquiera, sin tener
conocimientos especiales sobre el tema, los califique con un término equiparable al de psicópata
aquí utilizado.

 Tormenta psicopática
 Homicidio brutal.
 Masacre.
 Violaciones y asesinatos en serie.
 Otros actos asociales graves.
 Perversiones sexuales
 Parafilias.
 Incesto.

miércoles, 26 de septiembre de 2012

Cómo alejarse del psicópata


Cuando hablamos del psicópata vimos que su complementaria,  debe necesariamente mantener un  "contacto cero" con él una vez terminada la relación (ya sea porque el psicópata la deja porque ya no la necesita, o bien porque la complementaria se agotó soportando),   aunque su propia psique boicotee su intento de mantenerse a salvo.
Estos son los errores más comunes que una complementaria suele cometer en este intento de lograr  su libertad (según investigaciones del Dr. H Marietan, especialista en Psicopatía)

Uno: Creer que va a cambiar,   intentar  “curarlo” o ayudarlo a “superar” su psicopatía para que “cambie”
“También me atrajo el desafío de que él quisiera cambiar, y sobre todo porque creía que era por mí, por el efecto de mi amor”.
Dos: Matarlo. Siempre seguirá en su mente, seguirá siendo su amo,  esta vez  a través de la culpa , del remordimiento, del recuerdo.
Tres: Vengarse: como el psicópata le hizo daño, entonces la complementaria trata de dañarlo también, la venganza es un sentimiento generado por la presunción de que se ha cometido una injusticia.   Se venga aquel que se considera una víctima. Una vez que salió del circuito, la venganza la liga también al psicópata, sigue enganchada.  Pensar en vengarnos es pensar en el psicópata. Es tenerlo presente, re- presentarlo en nuestra mente. Mantenerlo vivo. Ahuyentar el olvido. Dejar que la vieja herida siga sangrando, que nos siga doliendo todo aquello. Dejar que el pasado se siga enseñoreando en nuestro presente y que lo anule, que impida que  disfrutemos el ahora por consagrarlo al pasado. Además, y por todo lo que ya hemos expresado en relación al psicópata y su complementaria en otros artículos, estamos en condición de concluir que  lo que  nos hizo el psicópata es lo que le permitimos, como complementarios, que nos hiciera;  que el tema de “víctima” no encaja en esta relación. Ambos, psicópata y  complementario, han participado para que se produjeran las acciones. Aquí no encaja el papel de víctima.  Pensar en la venganza, que es pensar en el psicópata, que es retenerlo en la mente, que  es seguir girando alrededor del amo, que es seguir siendo complementario. Y es, desde luego, romper el contacto cero, el factor válido para zafar del circuito psicopático.  Su autoengaño,  es otra de las artimañas de su “parte enferma” para volver a interactuar con el psicópata, esta vez con la pancarta de la justicia en lo alto.
Cuatro: Tratar de salvar a otros: quiere preservar a los demás del efecto dañino del psicópata, que no pasen por la experiencia destructiva que ella pasó.
Cinco: Creer más en la palabra que en los hechos. La complementaria cree a rajatabla en las palabras del psicópata más que en los hechos o evidencias. Si ella ve un hecho y el psicópata se lo “explica”, cree más en lo que le dice, que en el hecho en sí que está a la vista  en todo su esplendor de evidencia. Hasta puede  llegar a dudar de su percepción de realidad.
Seis: Tener diálogos internos. En ausencia del psicópata se tiene diálogos internos con él, que condicionan   la conducta de la complementaria.
Siete: Seguir cuidándolo después de separarse: “pobrecito, ¿qué va a hacer ahora”? que es un inútil, entonces, directamente, o a través de otra persona trata de ayudarlo.
Ocho: No prestar atención a las alarmas.
Nueve: una vez que salió del circuito del psicópata intentar formar grupos de complementarias para hablar sobre la experiencia que transitaron. Esto que parece un a primera vista un hecho positivo de  compartir historias semejantes, se convierte en un hablar sobre el psicópata y, cada vez que se escucha la experiencia de una complementaria, la oyente en su mente está recreando nuevamente a “su psicópata” y comparándolo con el otro psicópata. Es decir que, además de cortar el contacto cero mental, se solidifica la presencia del psicópata en la mente de las complementarias que lo refuerzan cada vez que se juntan a hablar sobre este tema. Es firmemente desaconsejable  la formación de grupos de complementarias. La complementaria debe estar ocupando su mente con el presente y el futuro y quitándole cada vez más espacio mental al psicópata que le gobernó la vida durante tanto tiempo. Todos estos errores lo único que logran es que la complementaria siga atada a su depredador, lo que debe lograr es quitarlo de su mente, liberarse de su lazo,  y para eso es imprescindible el "contacto cero".

Los Psicópatas


 A lo largo de mi proceso personal de sanidad, y en consecuencia de mi estudio de las patologías desarrolladas  por quienes son víctimas o victimarios en lo que es la violencia familiar, hay un tema que me ha apasionado, y es el de la codependencia,   del cual hay tanto para decir…
Estudiando la codependencia, los efectos, las consecuencias, me he encontrado frente a personalidades atípicas, personajes que pueden destruir vidas, que pueden hacer imposibles otras,    "los psicópatas", personas encantadoras, si las hay. Hablando en términos generales al decir "psicópata", es probable que en nuestra mente aparezca, casi de manera inmediata y por asociación, un asesino en serie, un sádico violador, un hombre que cuando se enoja deja la casa como si hubiera pasado un tornado y arrasado con todo. Hay de estos, soy psicopatías graves. Pero existe un psicópata casi tan dañino como el anterior, solo que este es, como decía, encantador, dotado de un extravagante carisma, muy sociable, buen "amigo" de sus conocidos(el psicópata tiene conocidos, tiene relaciones utilitarias, puede estar rodeado de  gente, de socios, pero no tiene amigos, amigos personales, no los necesita , no hace lazo real sino aparente y transitorio. No tiene amigos y tampoco deja tener amigos. El psicópata aísla, una persona que atrae la atención, que se destaca entre otros.
Pero…(estos peros son fatídicos), puertas adentro, en la intimidad de una relación,  el psicópata es capaz de destruir, literalmente, la vida de su compañera/o ó como la/o llamamos "su complementaria/o", aunque en muchos casos, ni siquiera le levante la mano. Yo voy a hacer referencia a  la  complementaria, ya que el porcentaje de mujeres que se relaciona con hombres psicópatas es muy superior del porcentaje de hombres que se relacionan con mujeres psicópatas.
Uno no puede existir sin el otro, su vida deja de tener sentido. El psicópata es un depredador, siempre está buscando una presa, algo que le pueda ser útil para la realización de sus objetivos, nótese que digo "algo", una de las características de la conducta del  psicópata es que cosifica al otro.
"La mujer común está muy apegada a los usos y costumbres, de tal forma que la observación de esos usos y costumbres son tan importantes como sus necesidades vitales; así es que muchas de ellas abandonan las relaciones con varones que se ajustan perfectamente a sus necesidades vitales, pero que no cumplen los requisitos formales de los usos y costumbres. La complementaria, en ese sentido, es distinta, y es justamente eso lo que capta el psicópata, pero más que nada, es la complementaria la que se da cuenta de que ese ser distinto está mirándola en sus esencias básicas, y con desprecio de los elementos formales. Por lo que vemos es una doble captación; por un lado, el depredador que olfatea a su presa, y por otro lado, la presa, que emana los aromas necesarios para atraer al depredador."(Dr. H Marietan)
Es por esto, que una vez que la complementaria comienza  a despertar de este adormecimiento de ubicarse en la condición de "cosa", un extraño sueño; la única salida es el "contacto cero", cero verlo, cero escucharlo, cero escribirle, cero leerlo, cero saber de el, contacto cero a rajatabla, de otra manera terminará volviendo al psicópata.
Luego de  la separación, la  complementaria del psicópata, por un largo período de tiempo lucha con diálogos internos, se siente culpable por cómo estará el otro a quién dejó, por el que debería hacer algo, ayudarlo a sanar, etc. etc., lo que no es más que una trampa que su parte enferma le tiende a su razón y es parte del "trabajo" que hizo el psicópata en su mente.
La psicopatía tiene consecuencias sobre los otros, es un hecho social, el psicópata hace y hace hacer.
"Puede elaborar exquisitos planes, detalladas secuencias o intrincados diagramas para sus acciones, pero es la descarga en lo real de todo ese material intelectual lo que lo hace psicópata. Otras veces el psicópata tiene una armonización inmediata con la situación y obra casi sin reflexión, ajustado instintivamente -arriesgaría- a lo que debe hacer. Es esto lo que provoca el mayor asombro: ¿cómo lo pudo hacer y de esa manera? Y si se lo interroga, si él quiere contestar con algo de verdad, dirá simplemente: "Es lo que había que hacer". Y hay que creerle, así lo siente.
Con esto se puede ir comprendiendo que no cualquiera es un psicópata, que no hay entrenamiento para lograr una mente psicopática, que no hay un medio que lo genere. Estos seres, que deambulan entre nosotros, son así. Son formas de ser en el mundo. Como lo somos todos, pero… tienen necesidades especiales y formas atípicas de satisfacerlas",   expresa el Dr. H Marietan (Interpsiquis 2012)

sábado, 18 de agosto de 2012

Buscan declarar en Argentina la emergencia por violencia de género

Las diputadas Virginia Linares y Victoria Dónda, del opositor Frente Amplio Progresista, instaron al Poder Ejecutivo a que declare la emergencia y utilice partidas presupuestarias para subsidiar a las víctimas de la violencia de género.
Dos diputadas de Argentina reclamaron que se declare la "emergencia nacional" por violencia de género en el país suramericano, donde el año pasado murieron 282 personas por este flagelo, confirmaron hoy a Efe fuentes parlamentarias.

Las diputadas Virginia Linares y Victoria Dónda, del opositor Frente Amplio Progresista, instaron al Poder Ejecutivo a que declare la emergencia y utilice partidas presupuestarias para subsidiar a las víctimas de la violencia de género.

"Hay una ley que se votó en 2009, que contiene políticas integrales acerca de este tema, que se deben poner en marcha y de las cuales no vemos acciones concretas. Lo que está faltando es un plan de acción para asistir a las víctimas de violencia de género", explicó hoy a Efe Virginia Linares.

La diputada reclamó que las víctimas puedan "recibir una asignación económica que les permita sacar al agresor de su casa en caso que sea necesario".

"Hemos notado que muchas mujeres hacen la denuncia pero después deciden volver con el agresor porque ellas por si mismas no pueden darle comida y vivienda a sus hijos", enfatizó Linares.

Esta propuesta surge en momentos en el que ha recrudecido la violencia de género en Argentina.

En los últimos días se han conocido dos casos que sacudieron a la opinión pública; uno de ellos fue el de una mujer brutalmente golpeada por su marido delante de su hija en la ciudad de Bahía Blanca y el otro, el de una joven que fue golpeada y recibió descargas eléctricas con una picana por parte de su ex novio durante cuatro horas el día de su cumpleaños.

Según datos del Observatorio de Femicidios en Argentina, que depende de la organización no gubernamental Casa del Encuentro, en Argentina murieron 282 mujeres en 2011 por culpa de este flagelo, que va en aumento.

De acuerdo a las cifras del Observatorio, en 2008 hubo 208 muertes por violencia de género; en 2009, 231 casos; y en 2010, 260.

"Estos números son un piso: nosotros relevamos medios y agencias de noticias, pero hay muchos casos que allí no se reflejan", explicó a Efe la directora del Informe y presidenta de la Casa del Encuentro, Ada Beatriz Rico.

"Celebramos y acompañamos todas las iniciativas como la de las diputadas, pero también pedimos que se reforme el Código Civil, para que el agresor pierda directamente la patria potestad sobre su hijo y no sólo la guarda, como pasa ahora, es fundamental que los agresores no críen a los hijos de las mujeres que asesinaron", señaló Rico.

Fuente: El Telégrafo

martes, 7 de agosto de 2012

Como decía la abuela.....


Aquellas que estamos acostumbradas a coser, sabemos que para arreglar un pantalón roto generalmente hacemos uso de algún otro roto que teníamos guardado por ahí.
Muchas tenemos, gracias a Dios, habilidad para coser y para hacerlo muy bien, por eso podemos hacer con dos pantalones rotos uno muy lindo, incluso más de lo que era originalmente, ya que podemos lograr que los remiendos bien aplicados y decorados hagan de la nueva prenda, un muy buen diseño, incluso a la moda.
Algo similar pasa con un alma herida, rota, quebrada por los golpes de la vida.
De repente halla otra que, al parecer, da sentido a la vida... "la arregla". Otra alma que sin duda también llega con heridas, y golpes a cuestas, quién no los trae?, todos tenemos una historia, pero, al igual que en la analogía de los pantalones, quizá logremos una hermosa relación, quizá, aparentemente sea la pareja ideal, quizá "dé la impresión" de ser un matrimonio ideal... y ... como decía la abuela, siempre hay un roto para arreglar un descosido... pero, una vez más, como en la analogía por mas lindo que parezca, no deja de ser un pantalón remendado, y ambos sienten el remiendo, muchas veces las costuras(relación) se ponen tirantes e incluso se cortan  o rompen.
La verdad es que mientras sea un roto el que pretenda arreglar al descosido, no obtendremos otra cosa que no sea UN REMENDADO.
La buena noticia es que hay uno que puede hacer nuevas todas las cosas, aquel que las creó, el mismo que puede deshacer y volver a hacer.
Con un corazón sano (nuevo) y otro corazón sano (nuevo), se puede dar a luz una relación sana, una familia sana, hijos sanos (emocional y psicológicamente hablando). Pero para ello, y siempre hay un pero, existe un primer paso sin el cual no llegaremos a ningún lado, y ese es ACEPTAR que necesitamos sanar las heridas del alma, del corazón; dejar de engañarnos a nosotros mismos y pretendernos superados; ACOSTUMBRADOS (a cargar una condición) NO ES LO MISMO QUE SUPERADOS.
NECESITAMOS aceptar nuestra condición y rendirnos delante de Aquel, el único, con el poder de sanar al alma.
"Les daré un corazón nuevo, y pondré en ustedes un espíritu nuevo; les quitaré el corazón de piedra que ahora tienen, y les daré un corazón sensible."  (Ezequiel  36:26)

A G

sábado, 7 de julio de 2012

Será que le gusta vivir así???


Por qué la mujer que vive violencia en su hogar no logra ponerle fin a su situación?
Se dice tantas cosas a cerca de lo que mantiene a una mujer  dentro de un hogar violento; lo cierto es que nadie que no haya vivido esa situación o haya estudiado el tema, sabe de lo que está hablando.
Me gustaría en este punto, diferenciar primero una conducta ocasionalmente violenta de una persona en la que se ha naturalizado esta manera de relacionarse dentro de su hogar.
Hay personas con baja tolerancia a la frustración que ante situaciones límite, o que se les “escapan de las manos” pierden el control de sus emociones e impulsos.  Así, vemos personas que ante determinada situación, arrojan o rompen lo que tengan a su alcance, pueden intimidar a quien tengan en frente o incluso llegar a “levantarle la mano”.  Estas son las personas de las que muchas mujeres dicen “intentó pegarme una vez, lo enfrenté y no se lo permití”, o “se la devolví y no lo hizo nunca más”.  Estas mujeres no se explican cómo puede haber otras que se dejan pegar, que no pueden poner límites….
Muy distinto es el caso de la persona violenta. Esta persona está en la búsqueda del control, la violencia es una lucha por el poder, el control sobre el otro; generalmente es una persona insegura, de baja autoestima y que proviene de un hogar también violento (perfil de un abusador). Esta es la violencia que está causando más daño a las mujeres  que la combinación de los accidentes de automóvil, asaltos y violaciones, la violencia que sufren las mujeres a manos de desconocidos es menor que la ejercida por personas con las que mantienen una relación íntima. Según las estadísticas el lugar más peligroso para las mujeres es su propia casa.
Generalmente la violencia psicológica precede a la violencia física, para cuando ésta llega, la mujer ha desarrollado una relación codependiente con el agresor y su autoestima está tan lastimada que no es capaz de tomar decisiones, sobre todo extremas, y sostenerlas.
Hablando de los hogares cristianos, de  hijos y siervos de Dios, esto no difiere en absolutamente nada, lamentablemente. Pero aquí nos encontramos con agravantes, como si fuera poco lo que está viviendo la víctima, “la iglesia” le suma a ello la culpa, claro, es típico de la ley.
Los religiosos, pastores, líderes, ministros (siempre aclaro que gracias a Dios, no son todos)  no saben cómo enfrentar el tema, por la sencilla razón de que es algo que se oculta, se calla, por qué???   Esta es una respuesta que merece desarrollarse aparte, lo hago aquí.
Entonces tenemos esta mujer cristiana, esta sierva de Dios con una autoestima por los subsuelos, se siente frustrada,  en todas las áreas de su vida, ya que el abusador la ha anulado,  una mujer que anhela servir a Dios, pero que su esposo se exaspera si pasa tiempo fuera de la casa, o si tiene amigas. Una mujer incapaz de sentirse realizada porque cuando opina, su opinión no sirve, es una tonta, cuando intenta tomar iniciativa en algo es desvalorizada, humillada,  si intenta desarrollar su ministerio, no está capacitada… Y cuánto más… 1 Tesalonicenses 4:6Que ninguno oprima, ni engañe en nada á su hermano: porque el Señor es vengador de todo esto, como ya os hemos dicho y protestado”.
1 de Pedro 3:7-9 “Vosotros maridos, igualmente, habitad con ellas sabiamente, dando honor a la mujer, como a vaso más frágil, y como a herederas juntamente de la gracia de la vida; para que vuestras oraciones no sean impedidas.  Y finalmente, sed todos de un consentimiento, de una afección, amándoos fraternalmente, misericordiosos, amigables;  no volviendo mal por mal, ni maldición por maldición, sino antes por el contrario, bendiciendo, sabiendo que vosotros sois llamados para que poseáis bendición en herencia.”
Ya no se atreve a opinar,  obviamente no se la consulta para nada, si intenta hacer algo por si misma lo tiene que hacer a escondidas, se le controla, en ocasiones,  hasta los correos electrónicos o lo que hace en el internet, donde “pierde el tiempo”.  En medio de estas “pérdidas de tiempo” es que llegan las consultas a este blog.
Estamos hablando de matrimonios cristianos, hablamos, incluso, de esposas de líderes religiosos,  que, si logran tomar valor, consultarán  a alguno de sus pastores, o en su defecto, si el  pastor es su esposo, quizá se anime a buscar ayuda fuera de la congregación.
Las respuestas típicas ya las hablamos aquí… y estas le agregan  la culpa, ella es la responsable de que “el problema”, “la prueba” no termine.
Es tan tonta que no puede decir basta? Es tan importante para ella el ministerio, la iglesia que es capaz de soportar la tortura diaria? Le lavaron el cerebro en esa religión? Por qué no se separa? Por qué no lo deja? Por qué no puede establecer  un límite sano en la relación? Estas y cientos de preguntas más surgen de aquellos que no saben lo que es convivir con un abusador.
La víctima puede esgrimir todo tipo de respuesta, “por los chicos”, “por el testimonio”,  “no tengo donde ir”, “si les digo no me van a creer”, “pensarían que solo intento desacreditarlo en la congregación”…. Cientos de argumentos,  y si hay hijos en el matrimonio las estadísticas muestran que las denuncias o pedido de ayuda son inferiores  en relación con matrimonios en los que no hay hijos.
Pero la respuesta a la pregunta inicial es, simple y sencillamente, porque no tiene la capacidad para hacerlo. Simple y sencillamente la anularon como persona, simple y sencillamente, aunque pocos lo entiendan, NO PUEDE,  psicológica y emocionalmente no está en condiciones de hacerlo.
Recuperarse es un arduo trabajo,  necesita fortalecer y llevar su autoestima  a niveles aceptables, necesita sanar psicológica y emocionalmente. Y muchas veces para lograr esto es necesario utilizar variados recursos, incluso la consulta psicológica o psiquiátrica, aunque los religiosos sostengan y aconsejen que no se puede recurrir a la psicología para tratar problemas espirituales, déjeme decirle que cuando los problemas espirituales llegaron a afectar la psique de una persona, nadie mejor que un profesional de esa área para tratarla. Otro recurso que no es aceptado por los religiosos es apartarse del maltratador cuando fuere necesario tomar distancia. En vano sería curar una herida y cambiar las vendas cada día si después de hacerlo le echamos encima una gota de ácido.  No hablo de separación definitiva o de divorcio, hablo de una separación terapéutica.
La decisión, una vez tomada debe mantenerse firme, no se puede ceder  terreno al maltratador, el va a seguir intentando avanzar siempre, como dijimos anteriormente, la violencia es una lucha por el control, por el poder.  Pero aquí quiero dejar en claro algo, el maltratador no es el enemigo, el maltratador también es una víctima de sus circunstancias, sus conductas son aprendidas, las aprendió en su casa, las fomentó la cultura y las avivó el silencio. Esposo y esposa son uno, si uno daña al otro se daña a si mismo, no solo está deteriorando  la salud  psicológica, emocional y física de su esposa, sino también la propia.
Efesios 5:28-29  “Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama.  Porque ninguno aborreció jamás a su propia carne, antes la sustenta y regala, como también El Señor a su Iglesia…”
Mateo 18:15-17 “Por tanto, si tu hermano pecare contra ti, ve, y redargúyele entre ti y él solos; si te oyere, has ganado a tu hermano.   Mas si no te oyere, toma aún contigo uno o dos, para que en boca de dos o de tres testigos conste toda palabra. Y si no oyere a ellos, dilo a la Iglesia; y si no oyere a la Iglesia, tenle por un mundano y un publicano”.
Por eso, lo primero es hablar, contar lo que está sucediendo, compartirlo,   el silencio mata.
El amor no duele, un hijo de Dios, con el amor de Cristo en su corazón no lastima, el maltratador también necesita ser reconciliado, restaurado, pero para ello debe reconocer que su conducta es violenta, aquí no se trata de mal genio, de cuestiones de carácter, detrás de lo que muchos se escudan, reconocer el problema es el primer paso para la sanidad, como la confesión es el primer paso para terminar con el pecado. La violencia es un pecado que debe ser sacado a luz. Ministrar a las personas que sufren no es una opción. ¡Todo lo contrario! Es un mandato evangélico, y el principal para hallar la sanidad de los esposos y del matrimonio.
Dice June Hunt, “puesto que el primer mandamiento establece: ‘No tendrás dioses ajenos delante de mí’, el principal problema de la codependencia es poner a otra persona por encima de Dios. El cuidado excesivo que se le prodiga hace que se comprometan las convicciones. El exceso de lealtad hace que se pierdan los límites saludables.  El   “amor” excesivo por ella, hace que usted diga sí en vez de no”.   Este pensamiento resume la condición en la que se encuentra la víctima.
Para utilizar una metáfora “todo buen marino sabe que los iceberg  no resisten el clima templado y las aguas cálidas. Y un cambio de actitudes sociales en el sentido de una mayor intolerancia hacia todo tipo de violencia es el equivalente a las aguas cálidas en que el iceberg está condenado a deshacerse poco a poco. Y si lo que necesita la violencia doméstica es, en afortunada expresión del profesor Gracia Fuster, “un cambio climático”, ¿quién duda de que la Iglesia pueda  contribuir considerablemente a ese cambio en el clima social que permita ir diluyendo progresivamente el iceberg?[1]
Muchas mujeres están abandonando la iglesia porque se sienten abandonadas por ella.



[1] Signos de los tiempos. Lucía Ramón

¿ES TU CÓNYUGE UN ABUSADOR EMOCIONAL?:


CONOCE SU PERFIL

El Abuso Emocional es un patrón repetido de relación no saludable entre adultos, que llega a producir, en las ocasiones más dramáticas, daños irreversibles.


Se le conoce también como “Violencia Invisible”, porque no es vista desde fuera, y, en muchas ocasiones, tampoco es percibida por la propia víctima.

 El Abuso o Violencia Emocional, puede llegar a ser mucho más dura que un golpe físico, y, jurídicamente, puede ser considerada como una violación de los Derechos Humanos, y puede producirse por un hacer o un no hacer, porque lo que es claro es que la omisión, supone abandono, y éste, también es maltrato.


La Violencia Emocional, pone en riesgo la salud física y mental del que la sufre, y priva de libertad psíquica al que la padece, produciendo en ocasiones grandes daños.


Aunque las investigaciones realizadas hasta la fecha en este tema, vienen marcadas por un predominio de situaciones en que el sujeto paciente de las mismas son mujeres, y el rol dominante lo tiene el hombre como abusador, sin embargo, existen casos, no infrecuentes en los que el hombre es el abusado.




Este modo de interacción puede considerarse patológico, es decir, enfermizo, y existe no sólo en lasrelaciones matrimoniales, entre hombre y mujer, sino también entre padres e hijos, profesores y alumnos, pudiendo darse casos de médico y paciente o un jefe déspota y sus empleados.




Hay que señalar que el Abuso Emocional puede darse en cualquier campo de la Sociedad, y no es privativo de los vínculos de personas de sexo diferente.




El perfil típico del abusador, presenta un conjunto de rasgos y características que son claramente identificables, y como elementos más destacables podemos señalar los siguientes:


• Rasgos paranoides, psicopáticos o sádicos con tendencia a desarrollar burlas y violar la intimidad del otro, al que persigue. No es infrecuente que intimide, amenace o chantajee de forma permanente. En ocasiones se producen abusos con la palabra, el silencio o la obra en manifestaciones variadas de violencia psíquica.


• Descalifica, con frecuencia, al otro cónyuge, tanto intelectualmente, como físicamente.


• Critica las actitudes sociales del otro miembro de la pareja, su desarrollo de las tareas domésticas, así como su modo de criar los hijos.


• Episodios de violencia acompañados por insultos, golpes, destrozo de objetos de mobiliario doméstico, portazos y salidas del domicilio con crisis de llanto, seguidas de arrepentimiento y nuevas promesas de cambio.


• El abusador es mentiroso, utiliza como mecanismo habitual las trampas, envía mensajes de carácter contradictorio y pone en peligro la comunicación constantemente.


• Tiene un comportamiento completamente distinto ante la familia, en la intimidad y en público, generando en el abusado, normalmente, situaciones de confusión.


• Vampirismo Emocional, ya que intenta succionar las emociones del abusado obstaculizando el desarrollo personal del otro.


• Malhumor permanente, motivado, según él por problemas laborales, sociales, económicos, o de salud, sus promesas y expectativas se ven frustradas sistemáticamente.


• Abandona al otro miembro de la pareja con indiferencia sexual, ausencias prolongadas del domicilio, se niega a acompañarle o a ser acompañado.


Los abusadores, convencen a su mujer de que ellos son los únicos que saben cómo se deben de hacer las cosas, y cuando estás salen mal, le dicen a la misma, que ella tiene la culpa, jactándose de que son superiores intelectualmente, son lo que vulgarmente se denomina como un “sabelotodo”.




Fuente: www.aa-divorcios.com

Por qué la iglesia oculta o calla la violencia en los hogares cristianos?


Por qué la iglesia no sabe qué hacer con la violencia doméstica, por qué no sabe cómo tratarla, cómo enfrentarla? Porque hay una especie de negación de parte de algunos, porque no podemos aceptar que en un hogar cristiano donde se supone reina Dios, los esposos, hermanos en Cristo, se maltraten, más bien hay “problemas de carácter”, de “convivencia, de pareja”…
Muchos líderes no tienen una posición bíblica desarrollada al respecto y ante la consulta desesperada de un miembro de la congregación con este problema, lo tratan precisamente como un problema más… y volvemos una vez más a las mismas respuestas “ayune y ore más”, “reprenda espíritus malignos”, “cambie su actitud para con su esposo, para que cambie el”, “espere en Dios, descanse en El”, “fortalezca su fe en medio de la prueba”.  Estimado lector déjeme decirle que esta “prueba”, si seguimos “esperando y descansando” solo se va a acrecentar, a profundizar  y muy lejos de ser una prueba para afianzar  nuestra fe, se va a convertir poquito a poco en el mismo calvario donde esta mujer es maltratada y golpeada en su estima, en sus emociones y aún en su cuerpo cada día.
 Matrimonios cristianos? Matrimonios  en liderazgo? Matrimonios pastorales? 
Si!!! Esos mismos… Hermano no rasgues tus vestiduras por lo que estás leyendo, es una triste realidad, esa misma que se tapa, que se esconde, la misma de la que en las congregaciones no se habla ni se enseña, pues cómo habría de hablarse o enseñarse al respecto si son los mismos ministros que al bajarse de sus púlpitos llegan a sus casas a ejercer la misma violencia sobre sus esposas (gracias a Dios, no todos, lo aclaro cada vez que puedo, porque en cualquier momento van a querer despellejarme los que se sientan tocados)
Pastores  y líderes que desvalorizan constantemente a sus esposas, muy lejos de “dar honor a la mujer como a vaso más frágil”;  pastores y líderes que desautorizan a sus esposas frente a la congregación,  que en cualquiera de sus prédicas comentan a modo de “testimonio” alguna situación familiar o íntima sin importar si su esposa o hijos puedan sentirse avergonzados.  Bromas frente a la congregación o amistades en las que siempre se desvaloriza a su esposa. Pastores o líderes que a la hora de tomar decisiones ministeriales la opinión de la esposa no cuenta,  y aún en cosas que algunos quizá podrían ver como nimiedades, tales como:  la pastora tiene que hacer una visita y necesita el auto, pero resulta que el auto lo “necesita el pastor” siempre y nunca está disponible para ella, o simplemente tiene que recurrir a un transporte público porque su esposo “no le puede  enseñar  a conducir” o “no le presta el auto porque conduce mal”.  Muchas de estas conductas han sido naturalizadas  e internalizadas por mucho tiempo y ni siquiera las esposas lo ven como una forma de abuso, pero que sumadas al resto de las conductas de esta índole que se manifiestan a diario, han llevado a estas mujeres a sentirse relegadas, en realidad lo son; a sentirse frustradas, pero como deben ser “sumisas” siguen llorando por los rincones y clamando de rodillas a Dios para que sea El quién las levante, quién levante su ministerio, quién le dé el lugar que ella merece como coheredera del Reino. Lo que no entiende esta mujer es que Dios no va a hacer algo que está en manos de ella hacer. 
Entonces tenemos la cabeza de la congregación (pastorado) enferma, si la cabeza esta enferma, que podemos esperar del cuerpo.
Es tiempo de hablar, es tiempo de sacar a luz todo lo oculto, estamos en un Kairos de Dios en el que la iglesia de Cristo está siendo transformada, está siendo restaurada y reconciliada con el diseño original,  todo lo que no esté de acuerdo con este diseño tiene que ser raído, arrasado,  decimos “venga a nosotros tu Reino”,  y cómo va a venir su Reino a nosotros? Nosotros los embajadores, representantes de Cristo en esta Tierra somos los que traemos su Reino, la tierra “clama, gime a una por la manifestación gloriosa de los hijos de Dios” y qué es esto sino traer su Reino.  Cómo se pretende hacer?  Desvalorizando, humillando, sometiendo, insultando, agraviando, maltratando, menospreciando, discriminando…..????   IGLESIA DESPIERTA Y DEJA ORGULLO, VANAGLORIA,  SACATE LA MÁSCARA, HUMÍLLATE DELANTE DE TU HACEDOR, ARREPIÉNTETE DE LAS ABERRACIONES QUE COMETES A PUERTAS CERRADAS, DETRÁS DE TUS MUROS  Y EMPIEZA A HACER LO QUE TU PADRE TE COMISIONÓ HACER POR SU INFINITA GRACIA, MOSTRAR EL AMOR DE CRISTO Y SU MARAVILLOSA OBRA DE RECONCILIACION Y REDENCION.  
La gente deja las iglesias porque encuentra en el mundo lo que se supone que deberían encontrar dentro de las congregaciones. Todos son amorosos, todos te reciben bien, pero en el momento de reflejar compromiso por el prójimo, pocos están disponibles, pocos pueden hacerlo desinteresadamente.
Pero decíamos por qué la iglesia oculta y calla la violencia? En este punto del discurso la respuesta es obvia; decimos violencia y asociamos inmediatamente en nuestro pensamiento el golpe físico, pero como ya expliqué en varios escritos la violencia no es solo física, los actos descritos anteriormente por parte del liderazgo en sus hogares, son actos de violencia.  La violencia es pecado, la iglesia oculta y calla su pecado, aunque “no hay nada oculto que no haya de salir a la luz” (Mateo 10:26) por eso en este tiempo Dios está haciendo limpieza, hoy en el Reino es uno de esos días de pleno sol, como muchas de nosotras las mujeres esperamos para limpiar, abrimos ventanas, puertas, movemos muebles, sacudimos alfombras, sacamos y lavamos cortinas, sacudimos en cada rincón y quitamos hasta el último grano de polvo.  Hoy en el Reino es uno de esos días de limpieza en el que Dios está levantando gente que no tema decir la verdad, que no tema decir lo que ve, que no tema denunciar lo que no sirve, porque hay que sacudir la mugre hasta el último grano de polvo.
Efesios 5:28-29  “Así también los maridos deben amar a sus mujeres como a sus mismos cuerpos. El que ama a su mujer, a sí mismo se ama.  Porque ninguno aborreció jamás a su propia carne, antes la sustenta y regala, como también El Señor a su Iglesia…”
Dice: el que ama a su mujer, a si mismo se ama, nadie aborreció su propio cuerpo, su propia carne, hermanos somos un mismo cuerpo, el cuerpo de Cristo y el mismo Cristo dijo en Mateo 12:25 “… Todo reino dividido contra sí mismo, es desolado; y toda ciudad ó casa dividida contra sí misma, no permanecerá”.  En un matrimonio donde uno de los esposos, hermanos en Cristo, partes del mismo cuerpo de Cristo,  hay violencia, hay división, cómo podemos pretender preservarlo a todo costo, a como de lugar, si está destinado al fracaso (no lo digo yo, lo acabamos de leer en Mateo, dicho por Jesús)
MUJER DE DIOS, VARONA DE DIOS, MUJER DE REINO, COHEREDERA DEL REINO ENTIENDE QUE NADIE TE DARÁ EL VALOR QUE TU NO TE DES, NADIE TE VA A LEVANTAR SI TU NO ENTIENDES QUE DEBES LEVANTARTE, DIOS NO VA A DESARROLLAR Y ESTABLECER TU MINISTERIO SI TU NO TE DECIDES A TOMARLO.  EL MALTRATO NO VA A CESAR HASTA QUE NO LO SAQUES A LUZ, A QUIÉN LE TEMES?, POR QUÉ NO HABLAS?, AL ÚNICO QUE DEBES TEMER ES A DIOS  Y EL ES TU ESCUDO Y TU FORTALEZA, ROCA FUERTE Y REFUGIO, EL ES TU LIBERTADOR. TOMATE DE SU MANO Y DENUNCIA EL PECADO DE LA VIOLENCIA.

viernes, 15 de junio de 2012

Para tener en cuenta al hablar de maltrato o violencia

Ningún ser humano merece ser maltratado o golpeado
La Violencia es incompatible con la dinámica familiar.
Nadie debe vivir con miedo, lastimado, insultado o amenazado en su propia familia.
La conducta violenta es una modalidad de comportamiento inaceptable y constituye un delito.

Quien maltrata es responsable de su provenir. 
Ningún argumento o razonamiento justifica el uso de la violencia. 
La conducta violenta puede dominarse con orientación y aprendizaje, revisando las heridas ocultas de la propia infancia, los modelos incorporados de resolución de conflictos, las identificaciones con personas violentas de la familia de origen y las motivaciones que se tienen para lastimar a quienes están cerca. Cambiando los hábitos de comunicación y las creencias negativas sobre la propia persona y sobre los demás se esta en camino de transformar el maltrato en un vinculo alternativo. 
Todos tenemos derecho a enojarnos y expresar la emoción del enojo sin causar daño; no tenemos derecho a llevar ese enojo a la acción porque el acto violento es una conducta destructiva y un falso desahogo de la ira. 
Una persona que es maltratada no tiene derecho a maltratar a otros. 
La creencia acerca de la “provocación” de la violencia es un mito que sirve para justificarla y tolerarla. 
Las intervenciones en Violencia Familiar deben estar realizadas por personas especializadas y entrenadas. 
No se puede ser neutral frente a una conducta violenta, ya que es un delito que atenta contra la salud y los derechos humanos. 
Las víctimas han de ser tratadas como personas individuales en riesgo y no como miembros o parte de una familia 
Las víctimas de Violencia Familiar no son masoquistas ni obtienen satisfacción alguna del hecho de vivir amenazadas y dañadas. 
Las niñas y los niños están diciendo la verdad cuando se animan a hablar de malos tratos y/o abusos sexuales. 
Las personas que ejercen violencia en su mayoría NO son individuos con alguna patología especial; atribuirles enfermedades es una manera de justificar su propia conducta y una forma de declararlos inimputables 
La conducta violenta es un problema en si misma. El alcohol y las drogas no son causa ni explican, aunque agravan el caso. 

miércoles, 30 de mayo de 2012

Información para jóvenes y adolescentes


- Una relación es cuando dos personas se quieren, se respetan y se divierten estando juntas.
- Es aceptarse mutuamente y querer a la otra persona con sus virtudes y sus defectos.
- Es tratarse bien, con ternura y sin faltarse el respeto.
- Es saber escuchar a la otra persona y poder contarle tus problemas, inquietudes y deseos.
- Es una unión de sentimientos, en el que una persona no se impone sobre la otra.
- Es tener confianza mutua y no comprobar si lo que hace o dice tu pareja es verdad.
- Es tener diferentes puntos de vista y poder dialogar sobre ellos sin que ninguno imponga su opinión. En la variedad está el gusto.
- Es compartir experiencias y momentos juntos y es poder disfrutar de tiempo y espacio para uno/a mismo/a, para estar con las amistades, la familia o realizar nuestro hobby favorito sin que nos moleste que nuestra pareja también lo haga.
- Es no abusar de la pareja pidiéndole constantemente que haga cosas por el otro.
- Es poder expresarnos con toda libertad y sin temor a que nuestra pareja se enfade por decir lo que pensamos o a que nos prohíba algo.
- Es cuando ninguno se enfada si el otro nos lleva la contraria.
- Es valorar el esfuerzo y el trabajo de mi pareja.
- Es cuando nadie impone su voluntad.
- Es aceptar y respetar las opiniones, los gustos, actividades y amistades de la otra persona.
- Es apoyarse y ayudarse mutuamente en planes y proyectos aunque éstos no siempre coincidan.
- Es reconocer cuando nos hemos pasado o equivocado.
- Es entender que a veces hay que ceder para estar de acuerdo en una decisión.
- Es cuando las decisiones que nos afectan a los dos son el resultado de un acuerdo mutuo.

Concepto erróneo de relación
- En una relación no debe haber problemas, discusiones ni peleas.
- Lo ideal es que las dos partes de la pareja quieran estar siempre juntos y que compartan todo.
- En una relación, todas las necesidades están cubiertas.
- En una relación es mejor que los dos sean iguales, que tengan los mismos gustos y que tengan las mismas aficiones.
- Es una relación hay que tener las mismas amistades obligatoriamente.
- En una relación el varón siempre tiene que tomar la iniciativa y decidir sobre las cuestiones importantes.

Una relación es de dominio y control (puede terminar en violencia) ...

- Si no soporta a tus amigos/as y prefiere que quedéis siempre los dos a solas.
- Si siempre es él quien decide cuándo quedar, a qué hora, dónde...
- Si te dice que no le gusta que vayas a ninguna parte sin él y te lo justifica diciendo que no puede estar sin ti.
- Si controla tu manera de vestir, maquillarte, hablar o comportarte.
- Si se muestra protector y paternal hacia ti diciendo cosas como: "yo sé lo que es bueno para ti", " sé lo que te conviene"...
- Si para conseguir lo que quiere hay veces que te hace sentir culpable.
- Si te chantajea si no quieres mantener relaciones con él, poniendo en duda tus sentimientos hacia él.
- Si te hace responsable de su infelicidad.
- Si "le pone de los nervios" que le lleves la contraria.
- Si te dice que sería "capaz de cualquier cosa" si le dejaras.
- Si a veces "se calienta" y te dice que le dan ganas de pegarte.
- Si no soporta no saber lo que haces a lo largo del día.
- Si necesita saber todo lo que dicen tus colegas de él.
- Si intenta tener controlado tu móvil para saber con quién hablas.
- Si tiene la sensación de que le estás provocando para que "salte".
- Si no se fía de lo que le cuentas y lo comprueba.
- Si le cuesta mucho disculparse, y más si es ante ti.
- Si siente que, como hombre, tiene que proteger a las mujeres.
- Si no está dispuesto a ocuparse a las tareas de la casa y se escaquea todo el tiempo consiguiendo que le den todo hecho.
- Si es él el que toma las decisiones importantes de la pareja.
- Si se burla de ti y te avergüenza en público.
- Si critica constantemente tus opiniones o tu forma de pensar.
- Si no se interesa por tus cosas.
- Si alguna vez se pone tan nervioso contigo que descontrola y sientes miedo.
- Si te trata como si fueras menos competente que él.

Ten cuidado con aquelllos que piensan:
Las mujeres son inferiores y deben obedecer a los hombres
Las tareas domésticas y los hijos "son cosas de mujeres"
La mujer debe seguir al marido, aunque tenga que renunciar a sus proyectos
Lo más importante en la vida de una mujer es casarse
Cuidado, ¡¡el machismo mata!!
Fuentes: Fundación Mujeres

lunes, 14 de mayo de 2012

Factores que perpetúan la violencia doméstica


1. La conducta aprendida

2. La presión de la cultura

3. La ilusión de dar un hogar tradicional a los hijos

4. Vergüenza

5. Creencias religiosas


¿Qué hacer?

1. Romper el secreto y pedir ayuda
Mientras no rompa el secreto, no pasa nada, nada cambia. Romper el secreto trae luz a la situación, posibilita la ayuda, permite que la sanidad de Dios empiece a trabajar en la vida de cada uno.

2. La separación terapéutica
La próxima medida general, lamentablemente, es la separación que no significa divorcio. Creo mucho en «separaciones terapéuticas» donde la pareja se separa y hay una mediación y un proceso de sanidad para ambos, inicialmente cada uno por su lado, hasta que estén listos para trabajar los términos de su posible regreso a la convivencia. Como la sanidad suele tener un costo emocional alto, no todos están dispuestos a pagar el precio del rescate de la relación matrimonial, por esto hay un alto índice de divorcios.

a. Algunos propósitos para la separación terapéutica:
Para la protección física de todos. No deben saber donde, para evitar que sigan conectándose por formas violentas.
Para romper el ciclo de la violencia. Hay que aprender nuevas formas de relacionarse y comunicarse. Si siguen juntos bajo el mismo techo, muchas veces siguen con los mismos vicios de relación.
Para subrayar que realmente hay un problema. Al estar el esposo separado, tiene más motivación para arreglar la relación debido a la incomodidad que pase donde esté.

b. Algunas tareas para cumplir en la separación terapéutica
1) Reconocimiento real y profundo por ambos de que hay un problema serio. No se debe permitir que minimicen la seriedad del problema: «Fueron apenas unos moretoncitos...». Personas involucradas en situaciones de violencia suelen estar en estado de negación, es decir, no reconocen la gravedad del problema. Hay que romper el estado de negación en que están viviendo. Este estado les ha servido de «estrategia de sobrevivencia».

2) Entrar en contacto con la enormidad de lo que han vivido. En cierto sentido, las cosas van a «empeorar» antes que mejorar. El veneno de años de abuso tiene que salir —no hacia el otro, porque esto no sería constructivo. Más tarde en el proceso de restauración podrán compartir y renegociar su relación, pero inicialmente, tienen que «vomitar» todo lo horrible que han vivido juntos y desde su infancia.

3) Arrepentirse de su conducta. Corresponde a ambos, por la violencia y por haberlo permitido por tanto tiempo sin buscar ayuda. El agresor también es víctima de su pasado, sus huellas, sus aprendizajes. Pero no hay que seguir en el papel de víctima, ni el uno ni el otro. Arrepentirse y asumir la responsabilidad que le toca, en lo que pasó y referente a lo que vendrá.

4) Sanar las heridas pasadas de cada uno. El pasado ha dejado huellas. Con la ayuda de Dios, hay que sanar las heridas, aprender límites sanos y saber decir no sin violencia y sin dejarse invadir. Es necesario tomar medidas reales que sirvan para ayudar a discernir lo que es conducta aceptable y lo que no lo es. Tienen que descubrir experiencias dolorosas en la infancia y en la adolescencia que nunca fueron atendidas, aprender a manejar las emociones y los sentimientos de maneras sanas, expresándolas de forma apropiada.

Es un tiempo en que cada uno debe crecer en su autoestima. Somos de infinito valor para Dios. Por esto, es importante que tengamos una mayor autoestima: debemos proteger lo que Dios hace en nuestras vidas, saber quiénes somos para el Señor, y valorar a quien Dios ha valorado de esa forma.

5) Cuidar a los hijos. Estos hijos han sufrido y han visto lo que jamás deberían haber visto. A los papás les tocará pedirles perdón, y producir fruto de arrepentimiento. Deben cambiar su conducta, para corregir los patrones viciados y para que las nuevas conductas sean enseñadas por palabra y acción. Deben asegurarse de que las heridas grabadas en la vida de los hijos también reciban sanidad.

6) Buscar ayuda con otras personas. Hay grupos de apoyo mutuo en los cuales se pueden involucrar, hay tanto para el agresor como para el agredido. Quizás la iglesia sería un buen lugar para ofrecer este espacio para que las personas puedan compartir, crecer y salir adelante, de preferencia con ha ayuda del Señor. Es cierto que «la iglesia que rasca donde pica ha de crecer». Conozco centros de refugio donde los maridos han ido a buscar ayuda para su conducta violenta.

La verdad es que nadie cambia a nadie. Cada uno puede cambiarse solamente a sí mismo, a nadie más. No podré cambiar a mi esposo; no podré cambiar a mi esposa. Cuando uno de los dos no quiere cambiar no resta mucha esperanza para el matrimonio. Dios puede hacer los milagros, pero prefiero ver el fruto de milagros de hecho, y no de milagros «de fe». El riesgo de lo que está en juego es demasiado grande.

Tenemos que aprender que es mejor tener una persona divorciada que una muerta. Y el divorcio no es un pecado sin perdón. La vida no termina con el divorcio aunque así parezca a veces. Como dice David Hormachea, el divorcio es el «privilegio» que Dios ofrece para situaciones insostenibles. Es el remedio para una situación enferma. Es mejor el divorcio que la violencia. Es mejor la vida, la paz, que la violencia o la muerte.

Idea básica de este artículo

La violencia doméstica es una problemática social y moral por la que la iglesia está obligada a responder proféticamente: (1) con la denuncia de este terrible secreto y (2) con la creación de un plan de intervención —que sea bíblico, produzca vida y sanidad— para ayudar a esas familias, especialmente a las que están en el seno de la comunidad de fe.

por Esly Carvalho (extraído de su libro Familia en crisis)






sábado, 17 de marzo de 2012

Deshazte de las cargas inútiles


En la película la misión, un jesuita, interpretado por Robert de Niro, viajaba por la selva, remontando el río Iguazú, en dirección a una aldea guaraní, junto a otros misioneros; atraviesan cataratas y montañas escarpadas, pero él es el único que carga u n pesado fardo, en el que, además de sus pertenencias personales, lleva una pesada aarmadura que usaba cuando era soldado, y la misma espada con que asesinó a su hermano.
Agotado, gasta enormes cantidades de energía vital en  cargar pertenencias totalmente inútiles. La dificultad de acarrear todo eso es un doloroso autocastigo para ell jóven misionero.
Cunado los indios arrojan su fardo al río y todo se pierde al caer por la gran catarata, él llora y ríe al mismo tiempo. Está a la vez desesperado, afligido y aliviado.
Hay gente que carga con una serie de culpas durante toda la vida.
Además del sentimiento de culpabilidad, hay una serie de preconceptos (religiosos, sociales, raciales, sexuales, culturales, profesionales) con los que las personas cargan durante toda la vida. Les fueron inculcados durante la infancia y ya no tienen nada que ver con su realidad actual, pero continúan limitando sus pasos.
A medida que vayas encarando los hechos pasados con una perspectiva diferente de la que has tenido  hasta ahora, aceptando lo que sucedió, sabiendo que "lo que pasó, ya pasó", tu autoestima aumentará, tendrás más energía para vivir aquí y ahora, mas vitalidad y más posibiliidades de ser feliz.
Cosas buenas y malas han pasado, pasan y pasarán siempre en nuestra vida. El secreto está en saber transformar las buenas vivencias en recuerdos permanentes, y las malas, en momentos fugaces de nuestra existencia.
LA LIBERTAD, MAS QUE UNA CONDICIÓN FÍSICA, ES UN ESTADO DEL ESPÍRITU

lunes, 13 de febrero de 2012

Cómo recuperarse de una relación conflictiva (Última parte)

8. CULTIVE LO QUE NECESITE DESARROLLAR EN USTED MISMA

Cultivar lo que necesite desarrollar en usted misma significa no esperar que él cambie antes de seguir con la vida. Esto también significa no esperar el apoyo de él -en cuestiones financieras, emocionales o prácticas- para iniciar lo más posible su carrera, o cambiar su carrera, o retomar los estudios, o lo que usted desee hacer. En lugar de subordinar sus planes a la cooperación de él, actúe como si no tuviera nadie más que usted misma en quien apoyarse cómo lo haría si no lo conociera. Descubrirá que es muy posible hacer que la vida funcione bien para usted cuando deje de depender de él y haga uso de todas sus otras alternativas. Cultivarse significa correr riesgos: conocer gente nueva, entrar a un aula por primera vez en años, hacer un viaje sola, buscar un empleo... cualquier cosa que usted sepa que necesita hacer pero no ha podido reunir el coraje suficiente para emprenderla. Este es el momento de zambullirse.

Regálese nuevas experiencias en lugar de juntar más objetos materiales (y más deudas). Dé un paseo por el parque, haga una excursión por las sierras o vaya al zoológico. Deténgase a observar la puesta de sol. La idea es pensar en usted misma y en cómo le gustaría que fuese su presente ese día, y luego permitirse, experimentar tanto el dar como el recibir. Por lo general somos muy buenas dando a los demás, pero tenemos muy poca práctica en darnos a nosotras mismas. ¡Entonces, practique!

A menos que eleve sus propios talentos al máximo, siempre estará frustrada. Y entonces podrá culparlo a él por esa frustración, cuando en realidad surge del hecho de que usted no sigue con su propia vida. El desarrollo de su potencial quita la culpa de los hombros de él y ubica la responsabilidad por su vida exactamente donde debe estar: en usted. Los proyectos y las actividades que usted elija la mantendrán demasiado ocupada para poder concentrarse en lo que él hace o no hace. Si en este momento usted no tiene una relación, esto le dará una alternativa sana al suspirar por su último amor o esperar al próximo.

Por otro lado, el hecho de cultivarse le permite crecer. Al llegar a ser todo lo que usted  es capaz de ser, usted también asume toda la responsabilidad por sus decisiones, su vida, y en esta forma abraza la adultez. Mientras no nos responsabilicemos por nuestra propia vida y nuestra propia felicidad, no seremos seres humanos totalmente maduros, sino que seguiremos siendo niños dependientes y asustados con cuerpos de adultos.
Finalmente, desarrollarse hace que usted sea mejor en una pareja, porque es una mujer creativa, totalmente expresiva, no alguien que está incompleto (y por lo tanto asusta- do) sin un hombre. Irónicamente, cuanto menos necesite una pareja, mejor pareja se vuelve usted... y atrae (y se ve atraída por) hombres más sanos.

                          9. VUELVASE EGOISTA

Para algunas personas, el egoísmo puede significar ser: indiferente, cruel, desconsiderada, egocéntrica, pero recuerde que usted es una mujer que tiene un historial de amar demasiado. Para usted, volverse egoísta es un ejercicio necesario para renunciar al martirio. Al comenzar a ponerse en primer lugar, usted debe aprender a tolerar la ira y la desaprobación de los demás. Son reacciones inevitables de aquellos cuyo bienestar usted había puesto hasta ahora antes que el propio. No discuta, no se disculpe ni trate de justificarse. Manténgase lo más serena y alegre que le sea posible y siga con sus actividades. Los cambios
que usted está haciendo en su vida requieren que los que la rodean también cambien, y es natural que se resistan. Pero a menos que usted dé crédito a esa indignación, durará bastante poco. No es más que un intento de volver a llevarla a su viejo comportamiento abnegado, a hacer por ellos lo que ellos pueden y deberían hacer solos. Finalmente, volverse egoísta requiere que usted reconozca que su valor es grande, que
sus talentos son dignos de expresión, que su realización personal es tan importante como la de cualquier otra persona, y que su mejor identidad personal es el mejor regalo que tiene usted para el mundo en general y, más especialmente, para quienes están más cerca de usted. Sin este fuerte compromiso con usted misma, la tendencia es volverse pasiva, desarrollarse no para su mayor expresión sino para beneficio de otra persona. No basta haber superado todas las dificultades que encontró. Aún le queda vivir su vida, explorar su propio potencial. Es el paso que sigue naturalmente cuando usted gana respeto para sí y empieza a satisfacer sus deseos y necesidades.Asumir responsabilidad por usted misma y por su felicidad da una mayor libertad a los hijos que se sentían culpables y responsables por su infelicidad (y siempre se sienten así). Un hijo nunca puede esperar equilibrar la balanza o saldar una deuda cuando uno de sus padres ha sacrificado su vida, su felicidad, su realización personal por ese hijo o por la familia. El hecho de ver que uno de sus padres abraza totalmente la vida da al hijo permiso para hacer lo propio, del mismo modo que ver sufrir a uno de sus padres indica al hijo que toda la vida es sufrimiento.Ahora usted puede decir que sí o que no cuando desee.
En este dramático cambio de roles, al pasar de cuidadora de los demás a cuidadora de sí misma, es muy probable que su conducta se vea equilibrada por cambios de roles en todas sus relaciones. 

              10. COMPARTA CON OTROS LO QUE HA EXPERIMENTADO Y APRENDIDO

Compartir sus experiencias con otros significa recordar que éste es el último paso en la  recuperación, no el primero. Ser demasiado dispuestas a ayudar y concentramos demasiado en los demás es parte de nuestra enfermedad, de modo que espere hasta haber trabajado duro en pro de su propia recuperación antes de emprender este paso. Compartir con otros significa también que cuando conozca a alguien que tiene
antecedentes similares o se encuentra en una situación parecida a la que tuvo usted, está dispuesta a hablar de su propia recuperación sin necesidad de coaccionar a esa persona para que haga lo que usted hizo para recuperarse. Aquí no hay lugar para manejar ni controlar, como tampoco lo había en su relación. Al hablar de ello, usted da esperanza a los demás, y validez a todo lo que atravesó en su lucha por recuperarse. Gana perspectiva de su coraje y de su vida. Ayudará a otras a recuperarse. Y mantendrá su propia recuperación.
Este hecho de compartir, entonces, es en última instancia un acto de egoísmo sano, por el cual usted promueve más aun su propio bienestar manteniéndose en contacto con los principios de recuperación que le servirán toda la vida.

"Las Mujeres que aman demasiado"   Robin Norwood





viernes, 3 de febrero de 2012

Cómo recuperarse de una relación conflictiva (Parte IV)

6. APRENDA A NO ENGANCHARSE EN LOS JUEGOS

Todo el mundo recurre a veces a los juegos en sus interacciones, pero en las relaciones insalubres los juegos abundan. Típicamente, los roles que se juegan  son variedades de las posiciones de "rescatador", "perseguidor" y "víctima". Se está participando en un ciclo sin ganador de acusación, refutación, culpa y contraculpa que no tiene sentido, es fútil y degradante. Deténgase. Deje de tratar que las cosas salgan como usted quiere mostrándose amable, enfadada o indefensa. Cambie lo que pueda, ¡Y eso significa cambiarse usted misma! Deje de necesitar ganar. Deje incluso de necesitar pelear, o hacer que él le dé una buena razón o excusa por su comportamiento o su abandono. Deje de necesitar que él se arrepienta lo suficiente. Es como un juego de ping pong, cuando ambos juegan al rescatador-perseguidor-víctima. Cuando a uno le llega la pelota, siempre la devuelve. Para no engancharse en el juego, usted tiene que aprender a dejar que la pelota pase de largo y caiga de la mesa. El hecho de jugar en cualquiera de estas posiciones, ya sea en una conversación o en la vida, impide que usted se concentre en sí misma y la mantiene en su patrón infantil de miedo, furia e impotencia. Usted no puede desarrollar su potencial como ser humano plenamente evolucionado, una mujer adulta a cargo de su vida, sin renunciar a cada uno de esos roles restrictivos, esas formas de estar obsesionada con quienes la rodean. Mientras esté atrapada en esos roles, esos juegos, parecerá que otra persona está impidiéndole alcanzar su meta de felicidad. Una vez que usted renuncie a esos juegos, le queda su total responsabilidad por su propia conducta, sus propias decisiones y su propia vida. De hecho, cuando los juegos terminan, sus  decisiones (tanto las que ya ha tomado como las otras que tiene ahora) se vuelven más obvias, menos evitables. Ahora usted debe desarrollar nuevas maneras de comunicarse con usted misma y con los demás, maneras que demuestren su voluntad de asumir responsabilidad por su vida. Menos "Si no fuera por..." y mucho más "Ahora estoy decidiendo que..." Cuando empiece a practicar este paso, necesitará toda la energía liberada al renunciar al hecho de manejar y controlar, para evitar caer en los juegos (el mismo hecho de anunciar "No voy a jugar" es jugar). Con la práctica se vuelve mucho más fácil, y después de un tiempo le servirá mucho para autofortalecerse. Muchas mujeres que aman demasiado han sepultado sus sentimientos tan profundamente que necesitan la excitación de las peleas, las separaciones y las reconciliaciones simplemente para sentirse vivas. ¡Cuidado! Al principio, el hecho de no tener otra cosa en qué concentrarse que su vida interior puede resultarle aburrido. Pero si usted puede soportar el aburrimiento, éste se convertirá en autodescubrimiento. Y usted estará lista para el siguiente paso.
7. ENFRENTE CON CORAJE SUS PROPIOS PROBLEMAS Y DEFECTOS

Enfrentar sus problemas significa que, habiendo renunciado a manejar y controlar a otros y a los juegos, ahora no le queda nada para distraerla de su propia vida, de sus problemas y de su dolor. Este es el momento en que usted necesita empezar a mirarse en profundidad, con la ayuda de su programa espiritual, su grupo de apoyo y su terapeuta, si lo tiene. No siempre es necesario tener un terapeuta para este proceso. En los programas de Anónimos, por ejemplo, las personas que han experimentado una gran medida de
recuperación pueden convertirse en patrocinadores de los recién llegados, y en ese rol a menudo ayudan a sus patrocinados a atravesar ese proceso de auto-análisis. Significa también que usted examine a fondo su vida actual, tanto lo que la hace sentir bien como lo que la hace sentir incómoda o infeliz. Haga listas de ambas cosas. Y también examine el pasado. Examine todos sus recuerdos, buenos y malos, sus logros, sus fracasos, las veces que se vio lastimada y las veces que usted lastimó a otros. Examínelo todo, nuevamente
por escrito. Concéntrese en áreas de especial dificultad. Si el sexo es una de esas áreas, escriba una historia sexual personal completa. Si los hombres siempre han sido un problema para usted, comience por sus primeras relaciones con ellos y, nuevamente, haga una historia completa. ¿Sus padres? Utilice la misma técnica con ellos.Simplemente deje que sus recuerdos, sus pensamientos y sus sentimientos fluyan. No analice lo que escribe en busca de patrones sobre la marcha; hágalo después. La mayoría de quienes amamos demasiado estamos atrapadas en el hábito de culpar a otros por la infelicidad de nuestra vida, mientras negamos nuestras propias fallas y nuestras propias decisiones. Este es un enfoque canceroso de la vida, que debe extirparse de raíz y eliminarse, y la forma de hacerlo es examinarnos a fondo y con honestidad. Sólo al ver  nuestros problemas y fallas (y también nuestros aspectos buenos y éxitos) como nuestros, en lugar de verlos como de alguna manera relacionados con él, podemos tomar las medidas
necesarias para cambiar aquello que hay que cambiar. En primer lugar, es muy probable que usted pueda renunciar a la culpa secreta relacionada con muchos de los acontecimientos y sentimientos del pasado. Esto despejará el camino para permitir que en su vida se pongan de manifiesto más alegrías y actitudes más
sanas. Cuando usted  deja de culpar a los demás y asume la responsabilidad por sus propias decisiones, queda en libertad de abrazar toda clase de opciones que no estaban a su alcance cuando usted se veía como víctima de los demás. Eso la prepara para comenzar a cambiar aquellas cosas de su vida que no le hacen bien, ni son satisfactorias ni le dan plenitud.
(Continuará)

Extraído de: Las Mujeres que aman demasiado -Robin Norwood