Cada proceso que nos toca vivir es diferente y además, es diferente en cada persona. Quizá ya pasaste por el proceso de reaccionar y hacerte consciente de que era tiempo de pensar en ti misma. Quizá ya pasaste por el proceso de tomar determinaciones en pro de tu bienestar psico-emocional. Quizá ya pasaste por el proceso de aprender que no necesitas depender de nadie más para salir adelante en la vida. Quizá ya pasaste por el proceso de entender que sí podías, que sí valías, que era mentira lo que te habían hecho creer. Quizá ya pasaste por el proceso de levantar la mirada y ver que el universo espera por ti, por tu manifestación. Quizá ya pasaste por el proceso que te llevó a tomar conciencia de que sólo puedes lograrlo de la mano del Creador...
Cada proceso es absolutamente necesario para pasar de nivel, para avanzar a una dimensión mayor, pero déjame decirte que si no pasas por el proceso de SOLTAR, difícilmente puedas avanzar a la siguiente etapa del camino, aquello que no logras soltar te mantiene anclado a eso que tanto deseas que quede atrás.
Si, ya se, es fácil decirlo. Pero del dicho al hecho hay mucho trecho... Cómo logro soltar?
Creo que lo primero es aceptar, cuando algo llegó a su fin no tiene sentido resistirse. Una vez aceptado es necesario tomar responsabilidad al respecto; está bien, lo acepto y qué hago al respecto? sigo dejando que mi mente se enrede en pensamientos y recuerdos inútiles o le doy a mi mente algo diferente en qué trabajar? La mente es un campo de batalla, ella almacena todo por imágenes, así que mientras más te enfoques en olvidar, más imágenes se van a hacer presentes y como nunca, recuerdos que quizá por años no habías registrado, de repente aparecen imágenes una tras otra como diapositivas en una presentación sin fin a modo de tortura... si, suele suceder. Es por eso que es necesario tomar responsabilidad y alimentar la mente con algo más, algo que sirva de terapia, gimnasia, pintura, clases de canto, de baile, andar en bicicleta, lo que te guste, lo que disfrutes, este es el momento de hacerlo. Hay que transformar la mente, darle algo más de que ocuparse y que te genere bienestar.
Otra cosa que hay que aceptar es que el pasado no existe, ya paso, dejó de ser. El futuro tampoco existe, pero tienes la oportunidad de crearlo porque tu presente, el hoy es la semilla de tu mañana. Comienza a planificar el futuro que deseas y hoy, siembra la semilla de ese futuro, comienza a trabajar por él.
Lo fundamental y más importante es desarrollar una relación de búsqueda y dependencia de Nuestro Padre Celestial, hasta ahora tu dependencia estuvo en una persona y no resultó, (por algo estás aquí, buscando cómo poder soltar)por una cosa u otra, no es tiempo de buscar responsables, es tiempo de buscar la sanidad, la restauración y eso solamente lo puede hacer el Creador, las heridas del corazón, de nuestro ser interior no hay medicina que las cure, el remedio más efectivo para la sanidad interior es el perdón, y sólo aquel que te formó en el vientre de tu madre será quien pueda restaurarte, El es quien llena tus vacíos.
También es importante no comenzar otra relación hasta no estar sano, "un clavo saca otro clavo" es la mentira más grande que se ha dicho, un nuevo clavo solo infecta la herida que dejó el clavo anterior.
En definitiva, y por lo que leíste hasta ahora, puedes ver que soltar es exclusivamente una determinación que es TU responsabilidad. Es TU decisión dejar de mirar hacia atrás algo que ya no existe. Es decidir mirar hacia adelante buscando la dirección de Dios y emprender la marcha con la mirada en la meta, y mientras, en el camino comenzar a descubrirte, a ver aquellos valores que se escondían dentro de ti y que hasta ahora no habías logrado pesar, descubrir dones, talentos, habilidades que habías olvidado y que hoy van a dar un nuevo sabor a tu vida... en definitiva, soltar es eso, dejar ir lo rancio y comenzar a saborear la vida que tu misma decidas sazonar.
No hay fórmulas mágicas, pero si hay una firme determinación seguramente lo vas a lograr, si fallas en el camino, o si te resulta duro y lleva tiempo no te condenes, no te juzgues, date el tiempo necesario, pero se perseverante, nada se logra de la noche a la mañana, nada es fácil, pero tomada de la mano de Dios la victoria está asegurada... comienza a saborear la vida que tu misma decidas sazonar.
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